
Tomando esto como base, y siguiendo los pasos de otras compañías como Google o Mozilla, Facebook se sube al carro de pagar por cada vulnerabilidad encontrada en el código de su sitio. Es decir, lo conocido como bug bounty. Para ello, han puesto en marcha un sitio llamado White hats a través del cual reportar los agujeros que se encuentren.
La recompensa por cada bug será de quinientos dólares, aunque puede aumentar en función de bugs específicos. En el sitio, se encuentran los detalles que especifican cuales son las condiciones que se necesitan para recibir la recompensa y cuales vulnerabilidades son aceptadas y cuales no.
Por lo general, las compañías que han puesto en marcha un bug bounty han obtenido buenos resultados de esta iniciativa y dudo de que ocurra lo contrario en el caso de Facebook.
