Microsoft anunció hace algunos momentos que completó el proceso de reparaciones alrededor del mundo, restaurando el servicio “para la mayoría de los clientes”. La causa de la caída habría sido un problema de DNS, aunque no se entregaron mayores detalles.
Aunque muchas empresas tratan de ofrecer los servicios en la nube como algo completamente confiable, no siempre es el caso – algo que recordamos cada vez que el servicio se corta o nos quedamos sin internet.
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