1. Hay que evitar que el contacto con el agua sea prolongado. En caso de caer al agua, sacarlo lo antes posible.
2. Tras esto, sacar lo antes posible la tarjeta SIM, la batería y la tarjeta de memoria, si la llevase.
3. Secar por completo el teléfono con un papel o paño absorbente y nunca usar el secador, ni siquiera con aire frío.
4. Dejar el móvil abierto, según lo hemos hecho en el paso dos, hasta que se seque por completo. Esto suele tardar unas 24 horas.
5. Cuando se haya secado, solo queda armarlo y probarlo. Desde la OCU garantizan que de esta manera tu teléfono volverá a funcionar como antes de caer al agua.

Como experiencia personal les comento que mi ex K310 se salvó del inhodoro, estuvo 5 segundos adentro hasta que me animé a rescatarlo. Lo dejé secar bien y anduvo de 10!